RETO:

Equipo de Dirección estelar que había sufrido una crisis durante un año. Esta crisis impedía las reuniones del Comité de Dirección comportando incomunicación entre departamentos, demora en las entregas y un consumo muy elevado de recursos en las actividades de desarrollo con un incumplimiento de fechas de entrega permanente.

Existía una autopercepción de éxito individual y de fracaso colectivo en un contexto de cambio radical del sector.

RESULTADO:

Acompañamos en un trabajo sistémico durante unos meses midiendo el estado del equipo de dirección en múltiples variables y buscando patrones. Las métricas evidenciaron relevantes sesgos cognitivos entre los miembros del Comité de Dirección (profesionales brillantes todos ellos) aunque la conductividad había bajado a CERO. Incorporamos diagnóstico, trabajo compartido, métricas de resultados e integramos la segunda línea de mando poniendo negro sobre blanco en los gaps.

Los gaps se trabajaron poniendo el foco en tres niveles diferenciados. Se integraron metodologías agile y efectivas para eliminar barreras. Se diseñaron nuevos espacios de decisión y se eliminaron contenidos-rituales de eventos corporativos diarios.

El Comité de Dirección consiguió llegar al 94% de éxito en los nuevos proyectos.